El viceministro de Economía encabezó la lista legislativa más votada en las elecciones primarias el 14 de agosto en la ciudad de Buenos Aires. En diálogo con el estadista, analizó el amplio triunfo del oficialismo y dio los lineamientos sobre la posible agenda legislativa para el nuevo Congreso, desde donde apuesta a presentar proyectos que contemplen a los sectores medios. “Hay que mantener la demanda y la inversión pública”, aseguró.
¿Cómo explica el triunfo de Cristina Fernández en las primarias?
Esta es una política que por ocho años llevó bienestar, protegió el empleo, el salario,
que amplió la jubilación, que instaló la asignación por hijo, es una política que crea
certidumbres. La posición regional de la Argentina frente al mundo también es muy
buena.
¿Y en la ciudad cómo analiza el resultado?
Hoy el porteño percibe que el país y la ciudad son atractivos, que nueve millones de
turistas por año vienen a Buenos Aires y que todo eso genera un gran movimiento
económico. Además se deben valorizar también logros que van más allá de lo económico, como la ley de matrimonio igualitario, el Fútbol para Todos o la puesta en valor de facultades y edificios como el de Ciencias Económicas. Este resultado evidencia que hay una consolidación del FpV porteño, con un piso electoral en crecimiento.
¿Cómo piensan trabajar pensando en octubre a partir de estos resultados?
Permanentemente trabajamos para el bienestar de la gente, tenemos logros y deudas,
pero la gente lo ve y sabe que vamos por más, que apuntamos a eso que falta. Por eso vamos a trabajar con la humildad para que se repita en octubre este resultado. Ser oficialismo implica poner en blanco sobre negro los activos que la gente siente que tiene; que la situación está bien, y eso tiene dos aristas. Por un lado las certezas, la ausencia de inestabilidad en las variables económicas, y por el otro, el acceso a bienes culturales que se brindan a través del Gobierno Nacional.
Como actual viceministro de Economía, ¿cuáles son los temas claves del área para lo inmediato?
Nosotros reconocemos que hay problemas, dificultades, pero estamos en un camino que los puede resolver. La economía tiene que seguir creciendo para lograr que el nivel de precios converja en niveles más bajos, también para llevar el desempleo al 5%, cuando hoy lo tenemos en un 7,3%, uno de los más bajos de los últimos años. Si no hubiéramos apostado por la demanda, el consumo interno, la buena relación con Sudamérica, no tendríamos el nivel de crecimiento que hemos logrado. En la próxima etapa es necesario resolver los problemas de crecimiento, no los de una crisis. Es necesario poner en valor todo lo desarrollado por las políticas nacionales que encabeza la Presidenta, y en lo económico acelerar la inversión en la generación de energía, y en todo lo que tiene que ver con logística, transporte de carga y personas.
Usted asumirá en un Congreso que puede tener varias figuras económicas como Martín Redrado o Alfonso Prat-Gay, ¿cuáles serán sus primeros proyectos?
Los primeros proyectos legislativos estarán destinados a la aprobación de un boleto
único en el transporte público del área metropolitana para que el subsidio vaya
directamente a la demanda. La idea es crear la Autoridad Metropolitana de Transporte, para que se articule en un solo ente todos los sistemas que conviven en el área: trenes, colectivos y subtes.
¿Qué otros puntos tiene en la agenda legislativa?
También es necesario constituir fondos de largo plazo para otorgar préstamos para
vivienda a sectores medios, con tasa de un dígito y por el 100 por ciento de la propiedad. Con eso se bajaría el piso de ingresos mínimos requeridos a los sectores asalariados formales para el pago de una cuota mensual. Esos sectores aún no fueron alcanzados por el plan que ya permitió al Gobierno Nacional la construcción de 560 mil viviendas.
¿Y el contexto internacional también incidió?
La población valoró las certezas económicas que da el Gobierno Nacional en un mundo que se advierte sombrío. La crisis puede generar una retracción del mercado internacional, y la Argentina es un país abierto al mundo; va a llegar a tener 80.000 millones de dólares de exportación este año, es el 20% del producto. La respuesta a esta situación deberá ser la que dimos 2009: fortalecer el mercado interno, mantener la expansión de la demanda mediante la negociación colectiva, la regulación del empleo, protegerse ante la avalancha de productos importados y tener un robusto programa de inversión pública.
(De la edición impresa)
