Maximiliano Pullaro es el nombre indiscutido de la jornada electoral santafesina. Encabezó la contundente victoria sobre el oficialismo y dió el batacazo en su interna. Pocas cosas se pueden afirmar con tanto nivel de certeza como el nombre del futuro gobernador de Santa Fe. En la tercera provincia argentina, fundamental para el proyecto de país que se plantee desde la Casa Rosada en el próximo mandato, se jugó una interna con grandes parecidos al contexto nacional de la coalición.
La configuración de alianzas entre Juntos por el Cambio a nivel nacional y en Santa Fe comparten que se presentan con perfiles similares. Pullaro, apoyado por Lousteau y Larreta hizo una campaña principalmente basada en propuestas mientras que Losada, quién fue la precandidata de Bullrich y Macri, apuntó a la confrontación discursiva, al slogan y a la presencia mediática.
Es más útil repasar las diferencias si se quiere, aunque sea pensar, en extrapolar conclusiones para las PASO nacionales del 13 de agosto. Por un lado, era una interna de tres, donde también competía Mónica Fein por parte del socialismo provincial. Pullaro logró hegemonizar el voto de centro izquierda, afín a la experiencia del Frente Cívico y Social, por lo que Fein quedó rezagada. Sin embargo, no se debe ignorar que la lista de diputados del socialismo quedó primera y encabezará la boleta para las generales. Liderados por Clara García, quién hizo una elección sobresaliente en Rosario, los socialistas se quedan con la mayoría de las posiciones de cara a la composición de la nueva legislatura.
Un segundo elemento es la ausencia de un actor que será decisivo a nivel nacional, una opción de derecha independiente y competitiva. Losada reprodujo un discurso anti político sobre el supuesto de que esas expresiones tendrían cabida en el electorado, pero el resultado ha demostrado lo contrario. El primer efecto que tiene esto a nivel nacional, es que se plantea la duda sobre los candidatos construidos mediáticamente y que tienen una fuerte sobrerrepresentación en redes sociales.
Si se pensase la elección nacional en Santa Fe a partir de estos resultados, es claro que hay un electorado ampliamente mayoritario que comparte una visión, un discurso y un modo más parecido al de Larreta o Schiaretti (aliado de Fein) que a posiciones que en este caso irían divididas como Bullrich y Milei.
Nada Nacional se puede asegurar con este resultado, el devenir de la interna de Juntos por el Cambio tiene la gran incertidumbre, ahora amplificada por la renovada desconfianza a las encuestas, en la distribución de preferencias en la Provincia de Buenos Aires.