Opinión Una noche en la ópera
En esta semana operística tuvimos a Toto de protagonista y la que sigue dando que hablar es la soprano Villarruel, que mantiene una agenda propia y fuerza los límites de la paciencia presidencial.
vie 26 Jul
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En esta semana operística tuvimos a Toto de protagonista y la que sigue dando que hablar es la soprano Villarruel, que mantiene una agenda propia y fuerza los límites de la paciencia presidencial.
El presidente ha demostrado tener poco margen a la hora de tolerar dicidencias en sus filas, dejando una marca de 56 funcionarios que han abandonado la gestión en 7 meses de gobierno.
A veces los hechos políticos hay que analizarlos no solo por lo que producen, sino también por lo que se hubiese dicho si no ocurrían.
La puja dentro del PRO tiene un resultado incierto, será imposible saber hasta que dentro de un año se vea cómo haya evolucionado la gestión presidencial.
El gobierno parlamentariamente más débil desde 1983, finalmente tuvo al menos una ley, con algunos detalles interesantes desde el punto de vista político.
En tiempos de crisis y una fase histórica líquida, la comprensión de los fenómenos se vuelve más compleja, al mismo tiempo que más desafiante.
Lo más importante de todo lo que pasó esta semana no es tanto la ley, sino el aprendizaje que hizo el oficialismo.
Con el ascenso de Francos triunfó la política sobre la "impronta management privado" que implicaba Posse.
En un nuevo escenario, la relación entre Milei y Macri presenta varias alternativas.
El presidente hizo un show de la presentación de su libro en un contexto de estabilidad de su imagen en medio de la tormenta.
Se está cumpliendo el 10% de este mando de Javier "Medialey". El oficialismo va haciendo los suficientes aprendizajes para evitar una crisis prematura, que incluso pondría en riesgo los precarios logros económicos de estos primeros cinco meses.
La derrota del peronismo en 2023 fue distinta a las anteriores, y por lo tanto requiere otro tipo de respuestas.
El Gobierno de a ratos parece querer transitar el camino del pragmatismo, pero a veces hace falso contacto.
El Gobierno parece comenzar a transitar una senda más pragmática, aunque se deja entreever la continuidad de la estrategia de confrontación total.
En medio de los problemas sanitarios y sociales, los actores político-económicos debaten sobre la posible salida de la crisis.
El clima opuesto entre la producción y el mundo financiero conviven con la resistente popularidad de un presidente anómalo.
La sociedad apostó el año pasado por una renovación política, más allá de las identidades partidarias e ideológicas. Pero para hablar de un cambio cultural, falta mucho.
Derrota innecesaria del gobierno en el Senado por el bendito DNU. Si hubiera aceptado la propuesta de la ley espejo -convertir al decreto en una ley- ahora podría ser Javier "Algunaley", pero sigue siendo "Sinley".
Los gobernadores le dicen que sí al pacto, pateando la pelota para adelante. Total, que quedan 80 días para el 25 de Mayo. En 80 días se puede dar la vuelta al mundo...o el mundo se puede dar vuelta.