Escenario

Aterrizar será peligroso

El "éxito" de Milei es que suben los bonos, baja el riesgo país y el dólar. ¡Y el pedal vuela! ¿A costa de qué? Mirar las consecuencias. Recordar "la cuarentena": Alberto subía en las encuestas.
Carlos Leyba 11-10-2024
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Éxito. No hubo "mi voto no es positivo": aquel que evitó una catástrofe, pero no la grieta que desbarrancó a la política...llegó el odio, Milei lo potencia.

Tres gobernadores K, eligieron "traición" a sus socios antes que "el llano". Consagraron el veto. 

"¡Qué ironía! El Gobierno sostenía que la Ley de Financiamiento Universitario era "ilegal" porque no decía de dónde salían los fondos. Todo es legal por decreto. El tema no era el costo fiscal, sino quién manda. No quieren leyes, quieren decretos" (O. Agost Carreño, diputado) 

Milei quiere gobernar a decreto y veto; y con Lijo en la Corte (gracias K) la Justicia quedará sometida al "tiempismo" del impresentable juez. 

La política le permitió "el estilo matón" cuando "le dio las herramientas para gobernar" contrariando el mandato opositor: la visión corta hace llegar tarde. 

Otra. Milei, decretazo, eliminó la obligación legal de exigir, para renovar deuda, mejores condiciones (plazos, quitas, intereses). En 2025 vencen US$ 17.000 millones más US$ 2.000 millones de Bopreal. 

Caputo II dijo "vamos a ir a un repo, financiamiento colateralizado, a una tasa mucho más baja de lo que te costaría hoy refinanciar los bonos. Nos sirve para garantizar el pago de capital de enero" (7/10 LN+).

El interventor en el ministerio -¿nominado por la City NY, el financista chileno JL Daza?- y viceministro de Economía, lo contradijo o desautorizó: ojo, garantía es "más". Dijo: la solución "no es más deuda, sino crecer" y sin crecimiento económico "la estabilidad no se puede conseguir". "La solución es crecer, desendeudarnos" (Infobae 8/10). 

Lógica del acreedor (Daza):  no te "endeudes" para la cuota; para pagar "en paz" hay que crecer. 

Crecer nos beneficia a todos, a los contribuyentes y a los acreedores. ¿Daza preguntará a Caputo II qué va a hacer para crecer?   

¡Qué difícil! ¿Están desconectados? A pesar de Daza, la deuda no deja de aumentar y esta vez la garantizamos...¿con el oro? ¿Desconexión o advertencia?

Importa cómo y dónde vamos. Escuchemos a Ricardo Arriazu, padre adoptivo de la criatura. Hace medio siglo inventó la tablita (y el carry trade) y mirando al presente dijo: "Viene mejor de lo esperado, pero hay caída de actividad, empleo, salario real. Está loco, dirán. Dije "mejor de lo esperado, no que "viene bien" (Clarín 8/10). Atención, no es trabalenguas, son sus palabras. La oración, compleja, es textual. 

Traducción: sólo un loco, Arriazu dixit, puede decir que con caída en la actividad, empleo y salario real las cosas vienen bien. Ricardo, aclara, no estoy loco, las cosas no están bien, están sólo "mejor de lo esperado". Sorpresa.  

¿Qué clase de derrumbe, o de huracán devastador, esperaba Arriazu? ¿Otros 5 millones más de personas en la pobreza, es "mejor de lo esperado"? ¿Cuántos millones más de pobres esperaban? ¿Hay algo más importante?

Me detengo, digresión para mensurar en qué grado de locura, diría Arriazu, hemos ingresado. Veamos. Comenta La Nación que Dinamarca, en la compulsa que hizo la Universidad de Pensilvania, es el país con mejor calidad de vida porque ofrece "atención médica y educación superior gratuita logrando así una increíble movilidad social" y "si bien sus habitantes pagan los impuestos más altos del mundo, los daneses consideran que es más importante apoyar el bien común para prosperar" (LN 8/10). 

En Dinamarca se apoya al "bien común" para prosperar. Aristóteles: "La mejor comunidad política es la constituida por la clase media. Es posible que sean bien gobernadas esas ciudades en las que el elemento intermedio es numeroso: produce el equilibrio e impide que se produzcan los excesos..." (Política). Movilidad social ascendente.

Hace rato y ahora, con un empujón tamaño cañón, la movilidad social se hizo "descendente". No por una catástrofe sino por una política como la que hoy sufrimos: el "por ahora" y el destino anunciado. 

Ejemplo: esta política económica afecta a las exportaciones, facilita las importaciones: se basa en un retraso cambiario (ancla cambiaria) programado e inferior a las tasas de inflación y de interés, lo que garantiza -vía carry trade- una renta anual de 27% en dólares "garantizada". ¡Otra que "San Pedro"! (no pagará, pero ilusiona...).

¿Esta prosperidad financiera (de pocos) basada en quema de dólares (que podrían ir a Reservas), acude en defensa del bien común, fortalece la movilidad social, contribuye al equilibrio e impide que se produzcan los excesos contrarios al mismo? Obviamente no. 

No es lo que preocupa u ocupa, a los hermanos Milei ni a la familia Caputo (Luis, Santiago, Francisco, Nicolas). 

Milei caminó al Palacio de Hacienda a celebrar otro "éxito". 

Mareo. Convengamos, el "que sí, que no" de la deuda "Caputo-Daza"; el que "no es que viene bien, sino que podría ser peor", de Arriazu, llama a la memoria el artículo de J. Stalin (Pravda 2/1930) "Mareados por el éxito". En plena orgía de sangrienta colectivización, el dictador decía: "Algunos de nuestros camaradas se han mareado con el éxito y, por el momento, han perdido la claridad de mente y la sobriedad de la visión". 

El "éxito" era "colectivizar" a costa de una batalla campal y de un colosal desastre productivo. 

El "éxito" de Milei es que suben los bonos, baja el riesgo país y el dólar. ¡Y el pedal vuela! ¿A costa de qué? Mirar las consecuencias. 

Recordar "la cuarentena": Alberto subía en las encuestas. Las consecuencias sociales y económicas fueron demoledoras. La claque de infectólogos celebraba "el éxito". Un avezado dirigente me dijo respecto del periodismo mileista: "Al igual que a los infectólogos les va a dar vergüenza salir a la calle".  Volvamos.

El lamentable clásico de los últimos 50 años fue -pocas excepciones- "bajan los bonos, suben el riesgo país y el dólar". 

La mayoría de los presentes no lo vivió: hace 50 años no había "bonos", no "había deudas", no "había riesgo país". Esa enfermedad nos fue inoculada hace 49 años y fue acompañada de vertiginosa expansión de la pobreza y brutal reducción, provocadas, de la participación de la industria en el valor agregado. Los pobres pasaron de 6% a 55% de la población y la industria de representar 30% del PIB a, aproximadamente, 15%. 

Ante este fracaso, cómo señala M.A. Cuervo, ¿qué política tenemos para emplear productivamente a los 270.000 argentinos que se incorporan año a año a la fuerza de trabajo y a los 4 millones que esperan un trabajo productivo? 

Los conurbanos son una inmensa "playa de estacionamiento" (J. C. Torre) de la pobreza y el desempleo. Pobreza es no poder producir el propio sustento. De eso se trata. 

No hay, en debate, ni en el oficialismo ni en ninguna oposición, una política que procure una salida al problema central. 

Como el problema es enorme "la clase dirigente" ha decidido ignorarlo: "el mercado lo resolverá", mientras retraso cambiario y apertura irracional destruyen lo que queda. "Una empresa de demolición" (M. A. Pichetto).

Nos alarmamos de sus consecuencias: pobreza, marginalidad, narcotráfico e inseguridad. ¿La respuesta, a menos trabajo, es más policía? 

"Donde entra el sol no entra el médico", donde hay pleno empleo y movilidad social, se desvanecen la pobreza, la marginalidad y la inseguridad y - en esas condiciones - es posible luchar contra el narcotráfico. 

En gobierno vacilan ¿Nos endeudamos o no nos desendeudamos?  Si no viene bien, entonces, es que ¿viene mal? ¿Mejor que lo esperado? Pero las cosas están mal: "hay caída de la actividad, empleo, salario real". Arriazu necesita aclararlo: "no estoy loco". El creyó que sería peor. ¿Peor? 

No hay claridad, ni sobriedad. Mareados por el "éxito". Hay confusión y desmesura. Peor. Veamos.

Arriazu (ideólogo del programa) consideró que la Argentina lleva "120 años de decadencia" explica... "¿Por qué caímos? Nos cerramos y nos dedicamos a producir lo que no tenemos ventajas". Arriazu viajó a 1904 para encontrar el origen del mal. 

Dio clase a los que escuchaban y también a los gigantes de la generación del 80. ¡Mirá! En 1899, en el Centro Industrial de Buenos Aires", Carlos Pellegrini, protagonista de la época, dijo "sin industria no hay nación". ¿Entonces teníamos ventajas?

Líder del PAN, que puso en marcha el desarrollo de la economía basado en la producción agrícola para la exportación, era de la estirpe de los visionarios, los que piensan el futuro y no proponen marcha atrás. 

Arriazu culpó a "lo malo de producir aquello en lo que no tenemos ventajas" (naturales). Lo mismo me dijo en 1974, A. Gómez Morales. Aludía, a esa "locura de Pellegrini" de industrializar. Y, sin saberlo, Gómez pronosticaba lo que ocurrió: 50 años de decadencia.

El programa de Arriazu es ceñirnos a la producción primaria con menor valor agregado. Una decadente "utopía retrospectiva" (J. Liotti) con la que no habrían sido posibles ni los tigres asiáticos, ni China, ni la India, que forzaron el desarrollo industrial. 

Aprecio la honestidad intelectual de Arriazu, un ideólogo que predica, pero -como el personaje de Moliere- sin saberlo. 

Su propuesta implica hacer de China la potencia imperial que nos compre naturaleza y nos venda trabajo. Milei ante Susana (¡Mi Dios!) dijo "lo interesante es que China no nos pide nada".

Relación geopolítica que nos condena a la "enfermedad holandesa" de largo plazo. 

Mientras tanto, EE.UU. y UE, protegen sus industrias perforadas por competencia China. 

Milei, sin trabajo ni inversiones reales y con política anti producción (inversión 26% abajo en agosto, O. Ferreres), con el fundamento "retrospectivo" de Arriazu, avanza en vender naturaleza para comprar trabajo chino. 

El desempleo, y el trabajo sin capital, consagraran el desarrollo de la gran villa miseria nacional. 

Un país caro en dólares (¡para bajar la inflación en pesos!) invita a viajar al exterior y a importar todo..., no podremos pagar sin sufrir aún más. 

Camaradas libertarios habéis perdido la claridad de la mente y la sobriedad de la visión, mareados por la ganancia del pedal: viajar (la imaginación) es divino, aterrizar (la realidad) será peligroso.

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