La fórmula única del radicalismo se impuso ante la suma de las opciones del oficialismo provincial.
En unas elecciones muy polarizadas (el 84 por ciento de los votos fueron a uno de los dos frentes más votados), el frente radical Cambia Mendoza se quedó con el triunfo ante el Frente para la Victoria (FpV). La fórmula de unidad de la UCR, compuesta por Alfredo Cornejo y Laura Montero, se impuso ante la suma de las opciones del FpV. La ventaja ascendía a más de 10 puntos porcentuales al comienzo del escrutinio, pero es de 5 por ciento con más del 85 por ciento de las mesas escrutadas.
En la interna del FpV, con el 25 por ciento de los votos del Frente, la fórmula ganadora fue la de Adolfo Bermejo y Diego Martínez Palau, surgida de la alianza entre la corriente más tradicional del PJ referenciada en Daniel Scioli y Juan Carlos Mazzón, y el sector que responde al actual gobernador, Francisco Pérez. Atrás quedaron el candidato del kirchnerismo puro, Guillermo Carmona, y el ex ministro del actual gobierno provincial, Matías Roby. La suma de todos ellos alcanzó el 40 por ciento de los votos, 5 puntos por debajo del frente CM.
Como sucede en muchas provincias, el radicalismo contó con el apoyo de un amplio abanico de dirigentes de la oposición. Aunque Cornejo quiso conservar para el radicalismo la foto del triunfo, tanto Sergio Massa como Mauricio Macri apoyaron a la fórmula de la UCR. Ni el Frente Renovador ni PRO presentaron candidatos propios en Mendoza.
El 21 de junio serán las elecciones generales. En unas elecciones que La incógnita está en cuántos de los votos del resto de los precandidatos del FpV logrará conservar Bermejo en junio en un contexto agitado para el peronismo-kirchnerismo local. A las PASO, el oficialismo llegó fuertemente dividido por las disputas entre los sectores del PJ más tradicional y los que responden al kirchnerismo duro. La pelea en torno al armado de listas en la provincia llegó a costarle su cargo al histórico dirigente del PJ, Mazzón. Los votantes de Roby, fuertemente enfrentados a Bermejo, podrían jugar en otro espacio en junio. Conocedor de esto, Cornejo planteó que su objetivo de cara a las elecciones generales será sumar los votos de Roby y todos aquellos que se fuguen del FpV.
En la última edición de el estadista, Horacio Meilán se preguntaba cuál era la mejor estrategia electoral: la unidad del radicalismo o la dispersión del FpV. Los resultados parecen haber dado la respuesta.
Los datos de las tres primarias realizadas hasta ahora muestran el peso que tienen las realidades locales y lo difícil que resulta proyectar los resultados de una provincia a otra. En Salta ganó el FpV, en Santa Fe el PRO y en Mendoza la UCR.